Puede haber una extensa lista de
alimentos que llegan a ser venenos y lo peor de todo es que se puede apreciar
cómo son alimentos muy frecuentes que añadimos en nuestra canasta familiar,
perjudicando gravemente tu salud en el presente y en el futuro...
En dicha lista, los alimentos llamados
venenos blancos, son alimentos que
coinciden en el color ya que han sido desprovistos de las cualidades nutritivas
que poseen por naturaleza, debido a la manipulación a la que han sido sometidos
para llegar a nuestra mesa.
El desarrollo de enfermedades crónicas
y degenerativas en nuestra actual sociedad, tales como la diabetes, la
hipertensión arterial, el cáncer, etc. tienen una relación con estos venenos
blancos que si no es directa, como mínimo han contribuido a su progreso.
A continuación enumeramos cinco de
estos venenos blancos: El azúcar blanco, la harina refinada, la sal refinada,
el arroz blanco y la leche.
Azúcar
Blanca o Refinada
Podemos decir que no es buena debido a
su nulo aporte en nutrientes, únicamente calorías vanas, por ese motivo el
azúcar refinada es uno de los causantes directos de los desequilibrios nutritivos,
la obesidad y la caries dental. Adicional a esto los edulcorantes químicos como
la sacarina, el aspartamo y los ciclamatos se le han relacionado con un mayor
riesgo para desarrollar el cáncer. El problema está en la manera como
incorporamos los azúcares a la alimentación, si se tiene en cuenta que las
frutas y las verduras por sí mismas ya están aportando azúcares de manera
saludable.
Harina
Refinada
Entre más blanca y fina sea la harina,
menos fibra, vitaminas y minerales aportan. Un ejemplo claro es el pan blanco,
el pan de salvado, la pastelería, no contienen minerales y mucho menos
vitaminas y por el contrario favorecen al desarrollo del cáncer, la caries, la
diabetes y el colesterol. Así que se recomienda el pan de centeno y el pan
integral.
Sal
Refinada
La sal que nos venden en el
supermercado es sólo cloruro sódico y aunque le han agregado flúor o yodo artificialmente,
pero no en las proporciones correctas en las que sí se encuentra en la sal
marina pura. Toda la comida que compramos ya procesada está repleta de sal
refinada (entre 8 y 20 veces más de la cantidad recomendada), provacando así el
riesgo de adquirir enfermedades cardiovasculares.
Arroz
Blanco
Igual que los anteriores, el refinado al
que es sometido el arroz le arrebata todo el aporte energético y vitamínico que
puede llegar a tener. Por tanto causa aumentos bruscos de los niveles de glucosa
en la sangre, lo que constituye un riesgo para la diabetes. El arroz se ha
consumido durante siglos, pero en el siglo XX comenzó a refinarse y consumirse como
arroz blanco. Una solución para esto sería la de consumir arroz integral ya que
libera la glucosa de forma gradual.
Leche
de Vaca
Se considera como una de las
principales causa de alergias en los niños, de acuerdo a estudios hechos por la
Academia de la Alergia, Asma e Inmunología de los Estados Unidos. El aporte de grasas saturadas y colesterol no del
todo aptas para el cuerpo humano hacen pensar que no es un alimento tan
completo y saludable como lo han hecho creer durante mucho tiempo. En los
estudios anteriormente mencionados, incluso la relacionan con la diabetes y la
osteoporosis ya que al ser baja en magnesio, no favorece para que el hueso absorba
el calcio y si a todo esto le sumamos los medicamentos y hormonas con los que
son tratadas las vacas ya que luego aparecen en la leche, hacen necesario que
sean sustituidas por otras alternativas naturales más saludables.
Lo mejor sería una buena dieta nutricional balanceada,
sustituyendo estos venenos blancos por fibras, proteínas y carbohidratos (no
refinados) y un aporte de grasas buenas controladas (, pescados, frutos secos…)
esta sería la mejor dieta para mantenernos sanos y así evitar los síntomas que
tienen más relación con la edad, cuando en realidad debería relacionarse con la
mala alimentación en el transcurso de nuestras vidas.
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